El ordenamiento jurídico de muchos Estados permite que el cobro de las deudas de una persona determinada se gestione, aparte de por ésta, por otra persona física o jurídica, que no tiene que ser necesariamente un abogado o un bufete. En Alemania, el régimen de los abogados, se dediquen o no a esta actividad, es distinto al régimen de las personas o empresas llamadas de cobro – Inkassodienstleister -, que disfrutan de unas ventajas que no tienen los abogados. Esto es algo que pretende erradicar parcialmente el “Proyecto de Ley de promoción de ofertas del mercado de servicios jurídicos más justas para los consumidores y usuarios” (Entwurf eines Gesetzes zur Förderung verbrauchergerechter Angebote im Rechtsdienstleistungsmarkt).
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Más información: Michael Fries