Esta modificación introduce el concepto de Microentidad en Europa y pretende eximirlos de la elaboración de las cuentas anuales para reducir los gastos y el tiempo que invierten en su elaboración. Una Microentidad se define como aquélla con menos de diez empleados, un balance anual inferior de 500.000 € y un volumen de negocios inferior a un millón de euros.
Según los estudios realizados por la Comisión Europea y conforme a lo indicado en el Directorio central de empresas del Instituto Nacional de Estadística de España, se calcula que aproximadamente un 88% de las sociedades en España se podrían considerar microentidades, mientras que en la UE existen casi 6 millones. La Comisión calcula que el éxito total de la propuesta ahorraría a las microentidades la cantidad global de 6.300 millones de euros al año.
La modificación de la Directiva ha creado polémica en algunos países, entre ellos España, Portugal, Bélgica, Luxemburgo, Austria, Italia y Francia. La preocupación reside en que, si bien sería ventajosa para las empresas la reducción de las cargas administrativas, se puede acabar perjudicando el derecho de información del mercado, de la Agencia Tributaria, la prevención del fraude y, en definitiva, la seguridad del tráfico económico. Por ello, se busca revisar el régimen aplicable de forma que siga siendo obligatoria la publicación de las cuentas anuales, o al menos parte, pero reduciendo posiblemente la periodicidad y optando para ello por los medios electrónicos.
Para más información por favor póngase en contacto con Uri Geigle: [email protected]